La leyenda de 37 años llegó al país para sumarse al Al Nassr e instalarse en Medio Oriente, luego de cerrar el contrato más alto de la historia del fútbol.
¿Qué buscael príncipe?
Cristiano decidió darle un vuelco a su vida deportiva y personal. Dejó el fútbol europeo para iniciar una nueva experiencia en una cultura completamente distinta y en un torneo que está lejos de ser de élite.
El periódico A Bola detalló el acuerdo que regirá hasta el 2025, el cual le permitiría embolsar un total de 500 millones de euros en dos años y medio. Es el “contrato más valioso en la historia del deporte mundial”.
A través del deporte, Mohammed bin Salman, el príncipe heredero, intenta tapar las violaciones a los derechos humanos después de la sangrienta guerra que lanzó en Yemen y el asesinato del periodista Jamal Khashoggi.
También tiene como propósito apuntalar su máxima aspiración: la organización del mundial de 2030. Su objetivo es arrebatarle la tarea a Argentina, Uruguay, Paraguay y Chile.
Con esto, el príncipe quiere cambiar la imagen arraigada durante 7 décadas de un reino que utiliza su riqueza petrolera para promover a escala mundial una interpretación ultraconservadora, supremacista e intolerante del islam.
En entrevistas, Bin Salman aseguró que el desarrollo del fútbol forma parte de su programa de gobierno. De esta forma, intenta impulsar el nacionalismo en lugar de la religión como elemento central de la identidad saudí.