Las herederas de los tronos de Noruega, España, Holanda y Bélgica son jóvenes, modernas y tienen en común ser hijas de madres plebeyas que las educaron con los pies en la tierra.
Rondan los 20 años y son educadas para cumplir ese rol en un futuro. Su ascenso a la realeza marca un cambio en las monarquías europeas hacia la igualdad de género en la sucesión.
Leonor de Borbón (España) es hija de los reyes de España, Felipe y Letizia. Es la primogénita y se espera que sea la futura reina de España cuando su padre abdique. Tiene 17 años y comparte el estilo sencillo y austero de su madre.
Amalia de Orange (Países Bajos) es la hija mayor de Guillermo y Máxima de Orange. Tiene 19 años y será la cuarta soberana de su país. A pesar de su estatus, trabajó como camarera antes de cumplir la mayoría de edad y estudia en la Universidad de Ámsterdam.
Isabel de Bélgica. Nacida en 2001, es la primogénita de Felipe y Matilde de Bélgica y será la futura reina. Actualmente, estudia Historia y Política en la Universidad de Oxford y vive en una residencia estudiantil.
Ingrid de Noruega. Hija del príncipe Haakon y Mette-Marit, Ingrid, de 19 años, fue criada de manera menos tradicional, haciendo la primaria en una escuela pública. Es conocida por su discreción y su estilo de moda.