5. Alberta Badlands, Canadá
Son un espectáculo geológico impresionante que ofrece una ventana al pasado prehistórico de la Tierra. Revela la historia terrestre, con capas de sedimentos expuestas que datan de hace millones de años, cuando esta área estaba cubierta por mares poco profundos y hábitats de delta.
Los restos fósiles de dinosaurios han sido descubiertos en abundancia en esta región, lo que llevó a que sea apodada como “el cementerio de dinosaurios de Canadá”. Los paleontólogos encontraron una amplia variedad de especies, incluidos el Tyrannosaurus rex y el Triceratops, lo que proporciona valiosos conocimientos sobre la antigua vida en la Tierra.
Fue originalmente una zona repleta de templos construidos por la cultura Cachapoyas, quienes precedieron a la civilización Inca. Los muros superan los 20 metros de alto y hay una gran cantidad de estructuras donde se realizaban rituales religiosos y sepulcros, además de viviendas. Es un reservorio de cultura de la humanidad.
4. Ciudadela de Kuélap, Perú
La montaña más alta tiene 1085 metros de altura. En 1831 Charles Darwin viajó con uno de sus profesores de geología por las montañas Carneddau. En su recorrido aprendió sobre este maravilloso lugar e incorporó técnicas de estudio que utilizó luego en su posterior viaje a las Islas Galápagos.
Se encontraron huellas de dinosaurios que fueron preservadas por el tiempo en forma de fósiles que alcanzan los 200 millones de años. Cuenta con alrededor de 2.600 marcas individuales causadas por los pies de los extintos reptiles. Es uno de los reservorios de huellas más grande de América del Norte.