El ex tenista, que fue número 1 y logró 49 títulos, fue sentenciado a dos años y medio de prisión por transferir ilícitamente grandes sumas de dinero y ocultar activos para declararse en bancarrota.

Los activos que ocultó son de 2,5 millones de libras (tres millones de euros) y transfirió 463.000 euros de su cuenta a otras, incluida las de dos de sus ex mujeres, entre otros cargos.

El tenista fue declarado culpable de cuatro cargos por el jurado de la Corte Real de Southwark, en Londres, en virtud de la Ley de insolvencia. También fue absuelto por 20 cargos.

Becker, de 54 años, y tres veces campeón de Wimbledon, fue entrenador del serbio Novak Djokovic. Últimamente estaba abocado a su tarea de comentarista deportivo en la televisión británica.

Ahora deberá cumplir al menos la mitad de su condena en la prisión de Wandsworth, antes de pedir la libertad condicional. Los medios británicos se preguntan cómo sobrevivirá quince meses allí.

Es que la prisión supo ser una de las más importantes de Gran Bretaña. Allí se realizaron 135 ejecuciones entre 1878 y 1961. Su estructura está deteriorada y ningún detenido quiere acabar allí.

En 2015, seis presos se suicidaron en Wandsworth. Un libro publicado por un ex detenido entre 2016 y 2017 dejó en evidencia que varias de las reformas prometidas por el gobierno nunca se llevaron adelante.

Para el ex N° 1 del mundo será un reto sobrellevar al menos un año y medio en una prisión descrita como “desmoronada, superpoblada e infestada de alimañas”, según una inspección que reveló Daily Mail.