A pesar de una ligera retracción en los precios, los alquileres en CABA siguen siendo elevados, superando en promedio los $300.000 para departamentos de 3 ambientes.

A la hora de firmar un contrato, se aconseja discutir detalladamente todos los términos antes de formalizarlo, y es posible acordar distintos plazos de ajuste a lo largo de su duración.

Los inquilinos pueden realizar contraofertas para negociar el precio inicial propuesto por el propietario.

Es importante examinar detenidamente el costo mensual de las expensas del edificio antes de firmar un contrato, ya que estas han experimentado un notable aumento.

Los contratos se están formalizando por períodos de 24 meses, con ajustes trimestrales, cuatrimestrales o semestrales basados en índices como el IPC o el ICL.

La garantía sólida del inquilino, respaldada por ingresos estables y seguros, es esencial en el proceso de locación.

A pesar de los desafíos, se observa un aumento en las consultas y la oferta de inmuebles en alquiler desde la implementación de ciertas regulaciones, lo que podría ofrecer una perspectiva positiva para los inquilinos a mediano plazo en términos de estabilización de precios.