Una de las exigencias para ser deportista de alto rendimiento es llevar estrictos hábitos. Incluso algunos futbolistas cuentan con sus propios chefs y nutricionistas para cuidar su físico.

Liam Holmes trabaja desde hace 12 años en la Premier League de Inglaterra y establece planes alimenticios para futbolistas de esa liga. Anteriorment trabajó en clubes como Fulham y Tottenham.

Uno de los secretos que marcó el especialista en nutrición es que el cuidado con el régimen debe mantenerse durante toda la temporada y no hacerlo de manera esporádica.

Una gran porción de carbohidratos como arroz, papas, granos o panes, acompañados de una ración de proteína magra y vegetales es lo indicado para la noche anterior a un partido.

El día del partido se evita la sobrecarga: una porción de proteína magra, carbohidratos simples, como un puñado de arroz integral, algunas verduras y una pequeña ración de grasa, como queso o palta.

Después llega el plan de lastres R”, que consiste en rehidratarse, repararse y reponerse Los jugadores toman un batido de recuperación, que incluye proteínas, electrolitos y carbohidratos.

Se les recomienda a los jugadores que no consuman un plato de comida hasta 60 o 90 minutos después de un partido. Y luego, lo mejor es ingerir una fruta.

La dieta al día siguiente inicia con un desayuno con: huevos, yogur griego, nueces, batidos y porotos para aliviar los dolores musculares y reponer energías.

En el almuerzo, el día en el que no suele haber entrenamiento, lo indicado es salmón, carne de res o muslo de pollo, acompañado por papas, granos y muchas frutas y verduras.

Los prohibidos son: alcohol, alimentos fritos, grasos y procesados Las papas fritas, las gaseosas y los dulces quedan fuera de la dieta.