El país enfrenta tres brotes epidémicos simultáneos de infecciones transmitidas por mosquitos: encefalomielitis equina del Oeste, dengue y Chikungunya.

Estos brotes están relacionados con el aumento de las temperaturas promedio debido al cambio climático y el fenómeno natural de El Niño.

El cambio climático inducido por actividades humanas ha ampliado el área de distribución de mosquitos como Aedes aegypti, aumentando así la transmisión de enfermedades.

Además, la urbanización desorganizada y las deficiencias socioeconómicas y ambientales favorecen la proliferación de criaderos de mosquitos en áreas urbanas.

Se recomienda tomar medidas de prevención como el uso de repelentes, ropa clara y manga larga, así como la eliminación de criaderos de mosquitos.

Sin embargo, existe la necesidad de abordar el problema de manera más integral, promoviendo iniciativas que mejoren las condiciones ambientales en espacios públicos, involucrando a la comunidad, municipios y empresas en la prevención y control de estas enfermedades.