En este tercer capítulo te explicamos qué es el phishing, la modalidad de estafa online que busca obtener datos privados de los usuarios.

Phishing deriva de fishing (pescar, en inglés) porque actúa como un anzuelo para los peces. Los estafadores lanzan un mensaje tentador a modo de carnada para que sus víctimas caigan en la trampa.

Es la suplantación de identidad en el mundo digital. Alguien se hace pasar por una persona o una institución en la que tenemos confianza y nos contacta por correo electrónico, redes sociales o algún otro medio en línea para intentar obtener datos de acceso o información de nuestras cuentas.

Formas de detectarlo

Si un mensaje dice que “ganaste” algo o que es “gratis” probablemente no sea real. Nadie debe pedirte información personal, ni datos de seguridad de cuentas o perfiles en redes

Ante la duda consultar con un adulto que pueda ayudar a definir cómo actuar. No cliquear si el dominio de correo electrónico del remitente está mal escrito, dirige a un sitio desconocido o tiene un nombre parecido al de una empresa.

Fijarse si la dirección tiene el icono gris de un candado y si en incluye HTTPS.

Si el mensaje llega por Whatsapp. No compartir ningún código de verificación. Si la persona dice ser un familiar o amigo, contactarlo a través de otro medio. No abrir links de promociones y/o publicidad y reportar el número a WhatsApp.

No guardar contactos con nombres que indiquen el lazo familiar o sentimental, serán los primeros en ser extorsionados. Cambiar el pin del buzón de voz, ya que suele ser sencillo de detectar.

El phishing es una práctica habitual. Gmail bloquea más de 100 millones de intentos al día.