Comenzó a funcionar como lo hacía en el mundo pre- pandémico.
Por primera vez en más de dos años los neoyorquinos podrán caminar por sus icónicas calles sin mascarilla y sin restricciones.
Nueva York fue una de las ciudades más afectadas por el coronavirus dentro los Estados Unidos y una de las que impuso prohibiciones más estrictas.
Los estudiantes podrán optar por el uso de la mascarilla en los establecimientos educativos y los maestros, que apoyaron en su momento las restricciones, acompañaron esta decisión.
Los únicos estudiantes a los que se les exigirá llevar tapabocas en las escuelas son los niños menores de 5 años que no son elegibles para recibir la vacuna.
“Queremos que los neoyorquinos sean inteligentes, flexibles y que se sientan cómodos con sus decisiones", afirmó el alcalde Eric Adams.
Las escuelas seguirán teniendo máscaras para quienes las usen.
Además, se eliminaron un conglomerado de normas para enfrentar el COVID-19, entre ellas, la exigencia del certificado de vacunación a cualquier persona mayor de 5 años.
“Seguiremos tomando decisiones de salud. El COVID cambia, se modifica, muta. Nosotros debemos estar abiertos a hacer lo mismo”, aseguró el alcalde