Hace 56 años los Beatles sacaban la foto para la portada de su nuevo álbum. La imagen del disco, que revolucionaría la música, se convirtió en leyenda. ¿Qué secretos se esconden detrás de esa imagen?

Paul imaginó a la banda con algunos personajes detrás. Se inspiró en una vieja foto de la Jim Mac’s Big Band, el grupo de jazz de su padre, donde los músicos posaban con varios fans alrededor.

Luego se sumaría el aporte de Peter Blake y Jann Haworth. Blake trabajaba con motivos circenses y con pequeñas multitudes. Él propuso que los que rodearan a la banda fueran personajes célebres.

Otra posible fuente de la imagen puede ser la profusa lista de agradecimientos (más de 160 nombres) de Freak Out!, el álbum que Frank Zappa había editado el año anterior.

En la tapa aparecen 58 celebridades y Los Beatles están repetidos.  Como en sus comienzos, con el pelo largo y traje, aparecen en figuras de cera. Pero también están en persona, con su estilo más hippie.                                       

El resto está compuesto por deportistas, escritores, personajes del mundo del espectáculo, músicos, leyendas, mensajes ocultos y hasta material para el mito de Paul is Dead.            

De los propuestos por John, dos quedaron afuera por ser demasiado polémicos: Hitler y Jesús. Los ejecutivos también pidieron sacar a Gandhi porque no sabían cómo se interpretaría el gesto en India.            

El arte de tapa costó 3.000 libras. En esos años, el promedio de lo que destinaban al rubro era de 75 libras.  La apuesta valió la pena.            

Peter Blake recopiló imágenes de los personajes y después se encargó de hacer copias de tamaño real y armar la multitud en cartón. La foto se tomó la noche del 30 de marzo de 1955 con los Beatles presentes.                                       

Algunos personajes que aparecen son: Bob Dylan, Karl Marx, Albert Einstein, Carl Jung, Oscar Wilde, George Bernard Shaw, Edgar Allan Poe, Marlene Dietrich, Marilyn Monroe y Marlon Brando.            

Además, uno de los incluidos es Stuart Sutcliffe, Stu, el bajista original del grupo que había muerto cinco años antes por un aneurisma cerebral. También hubo espacio para este homenaje.