Los combates son cada vez más crudos dentro del suelo ucraniano. Putin atacó un centro comercial en Kiev y hay al menos ocho muertos.

Mariúpol, la ciudad sitiada. Ucrania rechazó el ultimátum de Rusia y lo tildó de “delirio”. Informó que sus tropas no entregarán las armas ni abandonaran a los 400 mil civiles atrapados allí.

Mariúpol ha permanecido bajo un intenso fuego desde el comienzo de la invasión rusa el 24 de febrero. La ciudad se ha convertido en una de las más golpeadas.

Hasta el 14 de marzo, las autoridades ucranianas denunciaron que más de 2.500 personas murieron en el área.

Reino Unido condenó el “secuestro y la deportación” de ucranianos a Rusia. El ayuntamiento de Mariúpol advirtió  que las tropas rusas estarían llevando a los civiles a “campos de concentración”.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, comparó esta acción con las realizadas por la Alemania nazi.

Un ataque ruso a la ciudad de Sumy, en el noreste de Ucrania, provocó la fuga de amoníaco “altamente tóxico” en una planta química. Piden a los residentes evitar el contacto con el producto.

Nueva Zelanda enviará a Ucrania 3,45 millones de dólares. Se canalizará a través de la OTAN y servirá para comprar combustible, raciones, equipos militares de primeros auxilio y de comunicaciones.