Investigadores de la Universidad de Queensland estudiaron a mujeres australianas durante 20 años. Analizaron una serie de condicionantes que las predisponen a desarrollar enfermedades crónicas.  ¿Cuáles son?

Observaron que las mujeres de mediana edad que no logran tener conexiones sociales “satisfactorias” tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades crónicas.

“Las conexiones sociales deben considerarse una prioridad de salud pública en la prevención e intervención de enfermedades crónicas”, destacaron los autores del trabajo.

Los investigadores examinaron los datos de casi 7.700 mujeres en Australia, que tenían entre 45 y 50 años; y no tenían afecciones comunes cuando comenzó el estudio en 1996.

Durante el informe, las participantes informaron sus niveles de satisfacción con sus parejas, familiares, amigos, trabajo y actividades sociales cada tres años, durante un período de dos décadas.

De esta forma, se pudo rastrear quienes desarrollaron diabetes, presión arterial alta, enfermedad cardíaca, ACV y enfermedad pulmonar obstructiva crónica, entre otras.

Según los resultados publicados, más de la mitad (58%) desarrolló más de una de esas condiciones. ¿Qué notaron en común entre esas mujeres?

Observaron que aquellas participantes que habían reportado niveles más bajos de satisfacción con sus relaciones sociales tenían el doble de riesgo de desarrollar múltiples condiciones.