Arqueólogos israelíes hallaron una edificación antigua, no muy lejos de donde fue encontrada una mezquita del mismo período.

Son los vestigios de una mansión de 1.200 años en el desierto de Néguev, en la ciudad beduina de Rahat. Data del período islámico temprano en el siglo VIII o IX.

De acuerdo con la Autoridad de Antigüedades de Israel (AAI), esta edificación tenía un vestíbulo con piso de mármol y paredes decoradas con frescos.

La casa está construida alrededor de un patio y cuenta con cuatro alas, que contienen varias habitaciones para sus residentes.

Una lujosa sección presenta un pasillo de mármol con pisos de piedra y elaboradas decoraciones en las paredes. Los arqueólogos también encontraron fragmentos de platos de vidrio decorados.

Además, descubrieron bóvedas subterráneas hechas de piedra, que creen que se usaron para almacenar artículos a temperaturas más frías, lejos del sol abrasador del desierto.

Encontraron una abertura desde las habitaciones abovedadas, que conduce a una cisterna, donde los residentes podían acceder a agua potable fresca.

Se trata de la primera edificación de este tipo hallada en el desierto de Néguev, que ocupa más de un tercio del país, según el organismo.