Poeta y periodista, nació en 1819. De madre holandesa y padre británico, debió comenzar a trabajar desde muy joven ya que su familia no contaba con una buena posición económica.

"Hojas de hierba", el controvertido libro de poemas de Whitman, llegó a revolucionar la poesía de Estados Unidos en la segunda mitad del siglo XIX.

"El buen poeta gris de Estados Unidos”, como se lo apodó, permaneció diez años en Washington, donde vivió experiencias transformadoras para su vida y para su poesía durante la Guerra Civil.

El 16 diciembre de 1862, Whitman encontró el nombre de su hermano menor, George, entre los heridos en la Batalla de Fredericksburg y partió al campo de guerra a buscarlo.

Por dos días visitó numerosos hospitales temporales en Washington. Sin embargo, lo encontró en una tienda hospital en Falmouth, Virginia, con sólo una herida en el rostro.

Nunca pudo olvidarse de lo que vio en su recorrido: soldados muy jóvenes; muchos amputados. Descubrió en sus miradas miedo y dolor. Allí experimentó la soledad de la guerra.

Para entonces, Whitman enfrentaba sus propias batallas. Había perdido su puesto de trabajo como redactor; el clima de guerra redujo el alcance de sus poemas y su situación financiera era crítica.

Se quedó en Washington y decidió visitar hospitales. Pronto su figura desgarbada de 1,80 metros, barba tupida y sombrero se hizo familiar entre los pacientes y el personal médico.

Conversaba con los pacientes o les leía en voz alta. Ayudaba a vestirlos y administraba medicamentos. Cuando recibía donaciones de sus amigos, las repartía entre los enfermos.

Al terminar la Guerra Civil en 1865, Whitman estimó haber hecho 600 visitas a hospitales. Allí acompañó entre 80 mil y 100 mil soldados. Su obra refleja mucho de lo vivido en la guerra.